Esta es una historia fuera de lo habitual. En todos los partos que he fotografiado siempre conocí a la familia antes para poder explicar y resolver todas las dudas que pueden surgir, pero esta vez no fue así. El día que teníamos la reunión en mi estudio, recibí la llamada diciendo que nos veríamos en el materno directamente, mamá estaba de parto. Así que allí nos vimos.
Fue un parto realmente maravilloso, una madre valiente y fuerte que lucía radiante de felicidad, y un padre orgulloso muy emocionado. Todo fue muy rápido e intenso. Me siento muy afortunada de poder vivir esta experiencia y sentirme parte de ella.
Muchas gracias a la familia por confiar en mí sin conocerme y dejarme ser partícipe de un momento tan intimo y especial. Sobre todo a su mamá, por regalarme esta maravillosa experiencia de vida que tanto me aporta profesional y personalmente. Y gracias a todo el equipo de profesionales por dejarme estar allí.
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